Diario CLARIN, edición impresa, 20 de Noviembre de 20006.-
DESPUES DE LA SUSPENSION DE NUEVOS PERMISOS PARA CONSTRUIR
Se duplicaron las quejas por molestias de las torres
Es por obras en marcha. El Gobierno dice que ahora se controla el doble.
Es por obras en marcha. El Gobierno dice que ahora se controla el doble.
La polémica por la construcción de torres en la Ciudad no sólo afecta a las futuras obras: cientos de vecinos se quejan de que las actuales edificaciones en marcha no son los suficientemente controladas. Sin embargo, el Gobierno porteño asegura que en lo que va del año duplicó el promedio de inspecciones anuales.Los reclamos vecinales se sienten más desde que el tema se instaló en la agenda pública. Fuentes del Ministerio porteño de Gobierno informaron que en la última semana, tras la suspensión de permisos para las nuevas obras en seis barrios porteños, también crecieron las quejas por las ya autorizadas: de lunes a viernes recibieron 178 llamadas al 0800-999-2727 de denuncias, el doble que lo habitual.Hugo, un vecino de Caballito que prefirió no dar su apellido, contó: "Vivo en la manzana de Campichuelo, Aranguren, Eleodoro Lobos y Avellaneda, donde hay no menos de cuatro obras en marcha. El sábado arrancaron a trabajar a las 5.30 de la mañana, y hoy (por ayer) era la hora de la siesta y se sentían martillazos. No sabemos qué hacer, los vecinos y los albañiles terminamos siempre a los insultos".En Barracas, un barrio que quedó fuera del blindaje dispuesto por el Gobierno porteño, también hay problemas. "Por la obra que está en Montes de Oca al 200, los vecinos soportamos desde hace meses el permanente repiqueteo de grandes martillos neumáticos desde las 7.30 hasta las 17.30 sin parar. Han cubierto el frente con lonas que no llegan a detener el polvo y la tierra que la obra genera. No sé quien regula esto, pero brilla por su ausencia", contó el vecino Daniel Gregorian, en un e-mail que envió a este diario.En la Ciudad muestran estadísticas favorables. Según el Ministerio de Gobierno, en los primeros diez meses del año ordenaron 1.800 paralizaciones de obras por no contar con planos debidamente registrados o por irregularidades en la registración, y se dispusieron 1.200 clausuras. Paralelamente aplicaron 39 suspensiones a profesionales y cuatro inhabilitaciones. Y agregaron que este año llegarán a las 20.000 inspecciones, casi el doble de las hechas hace dos años.En estas cifras hay que aclarar que una misma obra puede ser clausurada más de una vez, o cerrada parcialmente. Una fuente de Gobierno contó: "Un hotel de Recoleta recibió al menos dos clausuras parciales, de sectores del edificio, antes de su inauguración. Y el edificio en Guardia Vieja 4167, que clausuramos esta semana, antes había sufrido una paralización temporaria".
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